Era cuestión de tiempo que Windows Vista dejara de formar parte de la lista de tareas de Microsoft. Tras más de diez años de soporte ininterrumpido, la compañía ya ha confirmado que a partir del día 11 de abril la versión de Vista no recibirá ningún tipo de soporte por parte de Microsoft. Pero, ¿en qué se traduce este cambio de cara al usuario que todavía se niega a dar el salto a Windows 10?

Las consecuencias del fin de soporte de Windows Vista se van a hacer notar en diferentes aspectos. La primera consecuencia, y la que debería preocupar a todo el mundo, reside en que ya no habrá más actualizaciones de seguridad para esta versión de Windows. Eso quiere decir que los usuarios quedarán expuestos a todas las nuevas amenazas de seguridad que circulen por la red a partir de ese momento, y viendo los retos de seguridad que plantea este año 2017, no estamos hablando precisamente de un asunto baladí.

Pero habrá más. A partir del 11 de abril, Windows Vista tampoco se actualizará para corregir errores. Es cierto que Microsoft ha tenido 11 años para parchear hasta el más recóndito rincón de su sistema operativo, pero cualquier pequeño fallo que se descubra en Vista a partir de este momento se tendrá que quedar así hasta el fin de los tiempos.

Tal y como explica Microsoft en una reciente entrada de su página oficial de soporte, ha llegado la hora de decir adiós a Windows Vista. El fin del soporte no solamente va a suponer el abandono del desarrollo de cualquier nueva actualización para esta versión, sino que además también vendrá acompañado del cierre del soporte técnico oficial de Microsoft que hasta ahora estaba disponible para los usuarios de este sistema operativo.

Ni las empresas ni los usuarios particulares lo tendrán fácil para seguir usando Windows Vista en este año 2017. Por muy poco que nos pueda importar el aspecto del abandono de las actualizaciones, si seguimos utilizando esta versión tarde o temprano nos acabaremos encontrando con algún error de compatibilidad al ir a conectar un dispositivo relativamente moderno a nuestro PC. El último teclado de Logitech, por ejemplo, empieza su compatibilidad en Windows 7.

Pero habrá más consecuencias todavía, y muchas de ellas vendrán impuestas por empresas ajenas a la propia Microsoft. Google, por ejemplo, ya ha anunciado que Gmail dejará de funcionar tanto en Windows Vista como en Windows XP: todo aquel que quiera tener acceso a la versión completa del correo de Gmail deberá tener instalada la actualización de Chrome 54 (o superior), una versión que requiere tener el PC actualizado por lo menos a Windows 7.

Fuente: computerhoy

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